
El profesional caleño creó la empresa Diseclar en la que diseña muebles a partir de plástico reciclado. Con anterioridad, había recibido el reconocimiento del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) como uno de los 25 ganadores del premio a la Innovación Social en América Latina y el Caribe.

En 2013 Diseclar logró contribuir con la reutilización de 48.300 kilogramos de desechos plásticos, que fueron utilizados en el proceso de fabricación, lo cual equivale a mitigar la tala de 800 árboles, reteniendo más de 6.833 toneladas de dióxido de carbono.
«La idea nace hace dos años cuando trabajaba en Bavaria, ya que todos los días nos daban una paca de agua y Pony Malta y al finalizar la tarde siempre veía las canecas de basura llenas de este plástico (botellas). Por otro lado una de mis funciones era hacerles seguimiento al material POP y a las sillas y mesas que se le dan en comodato a los tenderos, estos productos son plásticos y su rotación es alta porque se dañan muy fácil. Empecé a investigar y hacer pruebas con plástico reciclado para fabricar mobiliario, y llegué a la fórmula que hoy manejamos que es plástico reciclado con fibra vegetal», contó el joven emprendedor en la reseña que la Universidad Javeriana hizo de su premio en el BID.
A través de la página web de The Venture se puede apoyar a este ingeniero caleño, quien viajará a mediados de 2015 a Silicon Valley, Estados Unidos, a la premiación del concurso.
Ideas excelentes que mereces ser apoyadas por todos los estamentos.