El cortometraje cuenta la historia de Ana, una mujer desplazada por la violencia que lleva años tratando de sobrevivir con su hijo Carlos en la ciudad de Cali. La guerra le mató a su marido y a uno de sus hijos, y no quiere perder al único que le queda y hace todo para huir del barrio violento en el que vive. La única alternativa sería regresar a Caloto, su pueblo natal, un territorio marcado por la muerte. Pero es poco o ninguno, el espacio que les queda para la alegría y sus sueños, al igual que cientos de miles de víctimas de la guerra en Colombia.
“Es importante que desde el cine se aborden asuntos sociales, donde se pueda reflexionar acerca de nuestro papel frente a las realidades de la ciudad, se replanteen las políticas públicas y reflexionemos sobre nuestras posturas frente a una problemática tan transversal como lo es el conflicto armado”, afirma Juan Manuel.
El cortometraje ‘Sueños Baldíos’ fue asesorado por William Andrés Vega, director de cine y docente de la facultad de Humanidades y Artes, y participaron más de 20 estudiantes de la UAO, en diferentes roles cinematográficos como producción general, dirección de arte, gaffer, microfonista, maquillaje, script, montaje, entre otros.
Después de su paso por el Ficci, el cortometraje ‘Sueños Baldíos’ espera presentarse en diversos festivales de cine nacionales e internacionales.
¿Cómo fue el proceso de realización del cortometraje?
Según el estudiante, el cortometraje tuvo un periodo de aproximadamente cinco meses de escritura del guion, para después pasar a una etapa de seis meses de producción.
Contó con múltiples locaciones como el centro de Cali, el barrio Las Ceibas, la terminal de transporte y el corregimiento de El Tiple; lo que significó un reto para todo el equipo de producción, ya que implicaba una logística para el transporte de cámaras, luces, actores y las autorizaciones para grabar en cada locación.
“Para los actores se hizo el casting con dos escuelas de actuación de Cali. Fueron tres días en los que vimos varios talentos de jóvenes y adultos, fuimos bien rigurosos a la hora de escoger los actores, ya que el corto está soportado en la actuación de la protagonista y gran parte del éxito se debe a la interpretación de cada personaje. Finalmente, la experiencia del rodaje fue muy interesante, todo el trabajo en grupo se desarrolló de la mejor manera, cada uno le aportó al corto desde su conocimiento, fueron cinco días desgastantes, pero donde cumplimos con los objetivos de la historia”, concluye el estudiante.
Fuente: UAO
