Son muchos los que aún se sorprenden al escuchar el término Inteligencia Artificial (IA) y lo asocian con Hollywood, donde las máquinas prácticamente cobran vida y desplazan a los humanos. Sin embargo, la realidad dista mucho de lo propuesto por la ciencia ficción. Aunque no tendremos que pensar en androides que quieran apoderarse del mundo y crear un nuevo orden social, ya existen múltiples ejemplos que claramente se traducen en IA que conviven con nosotros… y mucho más cerca de lo que pensamos.
Algunos ejemplos de implementaciones exitosas que actualmente se pueden encontrar operando a nuestro alrededor y que utilizamos a diario son Google, Facebook o Waze; este último utiliza la información agregada históricamente y el comportamiento de los usuarios en tiempo real, y apoyándose en algoritmos analiza y toma decisiones autónomas acerca de las rutas más adecuadas para llevarnos a nuestro destino en el menor tiempo posible.
De esta forma, arquitecturas empresariales basadas en Machine Learning permiten un aprendizaje autónomo que impacta múltiples sectores productivos y diversas áreas al interior de las empresas. De hecho, el Big Data está siendo eficazmente aprovechado gracias a estas implementaciones, donde millones de datos son procesados para obtener información que va desde comportamiento del consumidor, hasta procesos financieros e incluso tareas como la selección de personal idóneo para un cargo. Al final del día, no se trata de desplazar a los humanos, sino de permitirles hacer a un lado tareas repetitivas, enfocándolos en actividades creativas y de desarrollo que aportan mayor valor agregado. Ahora bien, ¿cómo aterrizar estas tecnologías en nuestra realidad local?
IA en las empresas colombianas, una necesidad
Tanto Colombia como el resto de la región viven un momento donde las empresas de todos los tamaños y sectores económicos están descubriendo –y entendiendo– que la transformación digital dejó de ser un valor agregado para convertirse en una necesidad con miras a permanecer activos en el mercado.
Para Rodrigo García, CEO de One-Click, empresa enfocada en la transformación digital empresarial “día a día convivimos con tecnologías que trabajan autónomamente y que analizan infinidad de datos de una manera más rápida y eficaz que si lo hiciéramos nosotros mismos. Y a nivel empresarial esto se traduce en optimización de procesos, una mejor toma de decisiones y un incremento de la competitividad”. “De allí que migrar hacia el mundo digital dejó de ser un lujo para convertirse en una necesidad apremiante”, resalta el ejecutivo.
Según un reciente reporte de Confecámaras, durante 2018 se abrieron 328.237 unidades productivas en Colombia, entre sociedades y personas naturales. Sin embargo, por el lado de las cancelaciones, durante el mismo periodo se registraron 186.123; cifra crucial ya que están saliendo del mercado empresas generadoras de empleo, que aportan a la industria y dinamizan la economía.
Asumiendo una transformación temprana, las empresas podrán optimizar sus procesos y hacerse más competitivas, lo que finalmente se traducirá en una mayor probabilidad de mantenerse vigentes en el mercado beneficiando a empresas, empleados y gobierno por igual.
Fuente: edm Comunicaciones