Poetas, pintores, escultores, artesanos, músicos, bailadores y literatos como Álvaro, Lázaro, Gustavo, Bernardo, Omaira, Yaufett, Miguel Santiago, Omilcar, Pedro Nel, Silvia y otros, completaban su séquito. Estaban allí porque tenían muchas cosas en común: todos eran artistas de Cali, todos eran mayores de 65 años, todos carecían de pensión, todos estaban activos, todos tenían ganas de vivir, todos se sentían útiles y todos querían dejar un legado cultural a la tierra que los vio nacer o que los acogió como sus hijos.
Uno era el tema central en aquella improvisada reunión de amigos: Por primera vez en la historia de Colombia, las mujeres artistas mayores de 57 años y los hombres mayores de 62, empezarían a disfrutar de un auxilio económico de $498.000 bimensuales gracias a los recursos recaudados por la Alcaldía de Santiago de Cali a través de la Estampilla Pro Cultura, donde un 10% sería destinado para ellos, acto que será protocolizado este miércoles 10 de abril a partir de las 2:00 de la tarde en el Auditorio Principal del Centro Cultural ubicado en la calle 7ª Nº 4-60.
Ello fue posible por la aplicación del Decreto 2012 de 2017 a través del cual el Ministerio de Cultura empezó a favorecer a los gestores culturales de Colombia, siendo Cali la primera ciudad del país en aplicar esta medida debido al manejo responsable y transparente de los 14 mil millones 446 mil 526 pesos que hay en caja, con los que beneficiará a 320 artistas en este 2019.
Como beneficiarios de esta primera etapa clasificaron 118, aunque el beneficio llegará a 114, pues tres de ellos fallecieron antes de recibir su primera mesada y el otro pasó a heredar la pensión de su cónyuge, lo cual lo inhabilitó.
Para que la cadena de transparencia y buenas prácticas no se rompiera, el gobierno nacional le entregó a Colpensiones la responsabilidad de caracterizar la población apta y realizar los desembolsos, extendiendo así el favorecimiento a quienes por la edad o por no haber cotizado, no han tenido acceso a su pensión, permitiéndoles hacer un ahorro en el plan de beneficios Económicos Programados -BEPS- otorgándoles un 80% de lo que ellos alcancen a capitalizar.
“Esta platica es una bendición de Dios, decía Gloria Silva, gerente de la lija y compañera del artesano Yaufett Peláez. Quizá para muchas personas es muy poca monta, pero con esto nos alcanza para un mercadito, transportarnos o comprar algunas cositas con las que hacemos las artesanías, pues para nadie es un secreto que las chivas, los camiones, los trapiches y demás artesanías que fabricamos, nacen de materiales que reciclamos en la calle y no nos cuestan ni un peso”.
Aunque hay otros más ambiciosos y soñadores, como el pintor, escultor y literato Álvaro Lozano, un cuasi ermitaño que vive en la profundidad del bosque, en medio de guaduas y bambúes que él mismo cultiva en el corregimiento La Buitrera.
“Si Dios me lo permite y la gente me apoya, podré mostrarle al mundo mi ‘Fundación Museo de la Guadua’. En la actualidad, en mi casa de La Buitrera tengo 120 piezas fabricadas a lo largo de 40 años de trabajo. Inventé la tabla y el triplex de guadua, totalmente ecológicas porque salen de plantas que no se talan sino que se podan; las inmunizo con ají, aceite de linaza, cera de abejas, trementina y otros elementos. Le enseño esta técnica a la comunidad y a los niños, enseño pinceladas decorativas y les hago ver que en una pieza construida no invertimos más de 500 pesos y podemos vender el metro cuadrado de tabla en 120 mil pesos, lo cual es un negociazo”.
Aunque muchos les sacan provecho a sus manos, otros lo hacen con los pies, como Miguel Santiago García, conocido popularmente como ‘Guaracho’, beneficiario que logró su pensión por su constancia y tenacidad, las cuales viene exhibiendo como bailador e ícono de salsa de la vieja guardia hace más de 60 años, desde cuando una tía solterona y pitonisa vaticinó que aquel negrito flaquito y gareto sería una promesa del baile caleño. Y lo es.
Otros se la ganaron a viva voz, como Lázaro Antonio Silva Restrepo, quien lleva serenatas con su trío musical, el mismo con el que trasnocha, ensaya y espera a que llegue el borracho enamorado y entusado en busca de reconciliación. A estas alturas nadie se acuerda que él como cantante y compositor le dio la vuelta al mundo haciendo presentaciones con Olimpo Cárdenas, Lucho Bowen y Rómulo Caicedo.
Y conscientes de que la música de antes tenía ‘letra’ y la de ahora ‘letrina’, el poeta del pueblo: Omilcar Cruz, tiene en mente hacer un homenaje poético a Colpensiones, el Ministerio de Cultura y la Alcaldía de Santiago de Cali por el gran esfuerzo que hicieron en pro de los artistas que nada tenían y que hoy se despiertan con algo en el bolsillo.
Pero el pintor Gustavo Medina, no se queda atrás. Es el artista más veterano del parque del Peñón. Lleva más de 30 años exhibiendo sus cuadros al óleo y en acuarela. Y quiere plasmar en su lienzo la imagen del alcalde de Cali, Maurice Armitage, como el hombre que hizo posible que los artistas de Cali pasaran de la época del oscurantismo, al siglo de las luces, con una estampilla que les pegó en el alma.
Fuente: Alcaldía de Cali
