Mientras el semáforo estaba en rojo, los empleados y docentes invadían la avenida para decirle a los conductores y peatones que los actos violentos no representan a la Universidad.
El desagravio fue iniciativa de un grupo de funcionarios que considera que la ciudad no merece la violencia a la que ocasionalmente la someten un grupo de encapuchados que solo deja mensajes de violencia y destrucción.
Quienes salieron a la Avenida Pasoancho a las 9:00 a.m. vestían de blanco y se distinguían por llevar una rosa blanca como símbolo de paz y armonía.
Luego de permanecer por una hora en la jornada de desagravio los funcionarios y docentes regresaron al campus de Meléndez para continuar con sus actividades.
Fuente: Agencia de Noticias Univalle