Según cifras del Instituto para la exportación de la Moda en Colombia (Inexmoda), el 33 % de transacciones de cosméticos y artículos de higiene el último año se realizaron en supermercados y las grandes superficies.
En cuanto a las preferencias, el 19 % de colombianos compró sus productos de cosmética en farmacias, mientras que solo el 15 % recurrió a una tienda especializada en el rubro. Por otro lado, el comercio electrónico también registró una subida importante, y ahora aporta el 11 % de la facturación total de dicha industria en el país.
La venta directa continúa al frente como una opción para el consumidor, pues representa el 10 % de la cuota de mercado, en tanto que las tiendas departamentales y otros canales aportaron el 12 % de las ventas. En Colombia, el mercado masivo y las marcas locales siguen al frente de las preferencias por el consumidor promedio, aunque la belleza de lujo ha reportado un ligero incremento del 8 %.
De acuerdo con información de la Cámara especializada de la ANDI, a fines de 2020 las ventas superarán los 6,200 millones de dólares anuales en el país, en lo que se refiere a higiene, salud y belleza. Al respecto, las fragancias continúan liderando el mercado, seguido por los productos para el cabello, para el cuidado de la piel y el maquillaje. No obstante, aún se encuentra lejos de España, el país líder en consumo per cápita de perfumes. Latinoamérica es el segundo continente que más compra estos productos, seguido de España.
Según Monserrat Reina, directiva de Bella Piel, las colombianas invierten tanto en productos dermatológicos como en cosmética de calidad. Pues consideran que la dermis es su imagen y carta de presentación. Lo cierto es que la preocupación por el cuidado de la piel ha crecido en los últimos años. Esto se debe a diferentes factores, entre ellos los descubrimientos que la ciencia ha realizado sobre la piel y su envejecimiento.
El envejecimiento prematuro de ciertas zonas del cuerpo y rostro ha llevado a la industria cosmética y farmacéutica a focalizar las fórmulas de sus productos. Así pues, las cremas faciales y corporales genéricas han sido desplazadas por cremas que ofrecen resultados en zonas específicas del rostro y cuerpo. Es el caso de las cremas de contorno de ojos que facilitan la microcirculación de la zona, las cremas para manos que hidratan la zona con fórmulas oleosas y oclusivas o, incluso, las cremas que aclaran zonas del cuerpo como axilas. Este surtido de productos explica que la subcategoría de cuidado de la piel haya aportado $471,3 millones en el 2018, según ANDI.
Particularmente, para Colombia las cremas constituyen uno de los productos de mayor exportación, junto a los aceites y a las esencias, de acuerdo con datos de Inexmoda. Los principales destinos de las exportaciones colombianas son Asia y Europa. Entre 2001 y 2010 las ventas al extranjero crecieron a un ritmo de 19,6 %, de acuerdo con la entidad. Por otro lado, las importaciones han aumentado en 14,1 %, y en su mayoría provienen de México, EE.UU. y Perú