Son los pacientes del Consultorio Rosa, activado en un acogedor y cálido espacio del hospital, quienes reciben protección y atención, con la que el Gobierno departamental le apuesta a erradicar del Valle del Cauca estas violencias.
“Allí se les atiende no solo físicamente, sino psicológicamente con todo un apoyo sicosocial para que puedan tener la posibilidad de generar esa protección y, además, todo lo que tiene que ver con Fiscalía y Medicina legal, que también se hace en el mismo sitio. Así las víctimas no tienen que desplazarse de un lugar a otro”, precisó la mandataria.
En el Consultorio Rosa un grupo interdisciplinario de profesionales no solo se encarga de la atención en salud. En este lugar se activa la Ruta de Atención a Víctimas de Violencia de Género para garantizar que haya justicia.
“La persona que llega está acompañada desde el momento en que es atendida en lo clínico hasta el momento en que se toman las medidas de protección, y no va a correr ningún riesgo. Entonces lo importante es que se animen a buscar esta estrategia, que se animen a activar la Ruta, que denuncien, que no se queden calladas, ni callados”, dijo Luz Adriana Londoño, secretaria de Mujer, Equidad de Género y Diversidad Sexual del Valle del Cauca.
La coordinadora del Consultorio, Kelly Johana Camino, precisó que se han sorteado las dificultades para garantizar una buena atención, pues se trata de algo innovador.
“Hemos cambiado ese concepto de que la violencia no solamente se presenta en mujeres también tenemos poblaciones especiales como es la Lgbti, los niños, niñas y adolescentes que también estamos protegiendo”, agregó.
Y es que por la puerta del consultorio cada día cruzan víctimas decididas a terminar su tragedia. En seis meses más de 140 víctimas han sido atendidas.
“Estamos hablando de 137 mujeres, 28 niños, niñas adolescentes, tres hombres y cuatro pacientes de la población Lgbti”, recordó la funcionaria.
La intervención es terapéutica y jurídica
Anya Lorena Mosquera, psicóloga del Consultorio Rosa, señaló que el servicio para quienes acuden en busca de ayuda ha sido de la manera más sensible y humanizada posible.
“El deseo es no revictimizar, el objetivo es poder brindar a estas víctimas unas condiciones aptas y adecuadas para que lleguen a un proceso que sí lleve a una reparación, un proceso que sí sane desde la parte emocional y que de alguna manera las proteja de esas situaciones y no vuelva a ser víctima”, precisó.
Betsy Castillo, abogada del Consultorio Rosa, dijo que en todos los casos se activa el Código Rosa o la Ruta de Atención, aunque debe tenerse en cuenta que las circunstancias son distintas y así como hay algunos que llegan ya con una denuncia instaurada y se les hace una atención por el área externa, buen número son por la atención médica.
“Lo importante es que ninguna de las víctimas que ingresa al Consultorio Rosa se queda sin la activación de la Ruta”, dijo la abogada.
Y mientras desde el Estado y sus instituciones se abren las puertas para la atención integral para garantizar su protección, el llamado a quienes viven el flagelo de la violencia de género es a no callar.
“Ser víctima no es motivo de vergüenza, ser víctima no nos hace menos personas y es necesario saber que hay sitios, hay lugares como el Consultorio Rosa para darles atención”, dijo la psicóloga Anya Lorena Mosquera.
Porque estas personas deben saber que hay un mundo de oportunidades después de la violencia y que ellas merecen restaurar la vida y vivir fuera de la violencia que los está afectando, dijo Betsy Castillo.
De esta manera es como el Valle del Cauca busca erradicar la violencia de género.
“Realmente lo que queremos es proteger a nuestras mujeres y a nuestros hombres cuando sean violentados”, concluyó la gobernadora Dilan Francisca Toro.
Fuente: Patricia Elena Aley / Gobernación del Valle.
