Édinson Tigreros explicó que para llegar a ese documento se tuvo en cuenta el marco contractual del contrato suscrito en noviembre del año 2015 entre el gobierno del Valle, la Fundación Universidad del Valle y la Escuela de Ciencias del Lenguaje de la misma Universidad, donde se estableció la creación de la política de acuerdo a los resultados arrojados por unas mesas de concertación integradas por los sectores Educativo, Institucional y Productivo.
Aseguró que, dicho contrato que se tenía con la Fundación Univalle por recursos del orden de los $5.500 millones, denominado Ambientes Innovadores en Inglés, también tenía el componente relacionado con el desarrollo de las mesas, para estructurar de manera participativa todo el contenido base de la política, para ser presentado a la Asamblea. “Desafortunadamente tuvo una gran cantidad de dificultades estructurales que llevaron a realizar unos ajustes y estos dilataron en el tiempo la implementación de la política, porque los recursos que fueron asignados como fuente de financiación para el contrato, en el 2015, fueron por regalías, y por lo tanto cualquier cambio del componente estructural del proyecto debe llevarse a una mesa técnica del OCAD para ser aprobado”.
Ejemplo de ello, en el componente inicial donde se dijo que la formación estaba dirigida a los estudiantes de los ciclos complementarios de las escuelas normales, “que en este momento ya no son, en términos estrictos, competencia del Departamento, que tiene a su cargo los grados de cero a 11, y esa población objetivo no era congruente con lo que buscaba el proyecto, ese fue un primer cambio que debió darse”, anotó Tigreros.
También se encontró que el proyecto estaba definido de acuerdo a una inversión internacional y una nacional, pero cuando se revisaron en el 2016 los valores asignados a esa propuesta estaban muy por debajo de las posibilidades de hacer una inversión internacional y se pasó a una sola nacional, en este caso con la anuencia del departamento del Quindío.
“De igual manera, el tema del paro nacional de educadores del 2017 generó una gran cantidad de dificultades para el desarrollo de las actividades que ya estaban definidas en el contrato”, puntualizó el Secretario de Educación.
El contrato con Univalle ha permitido que ciento cuarenta y nueve docentes fortalecieran sus competencias comunicativas e interculturales en los niveles B+ y B2; asimismo, el programa de Bilingüismo ha brindado actualización en la metodología y diseño curricular que se imparte a licenciados en lenguas y sus competencias, enfoque orientado a la acción, interculturalidad, integración de habilidades comunicativas a los componentes cultural y lingüístico, autonomía y estrategias de aprendizaje.
Con la creación de la Política Pública de Bilingüismo en el Valle se espera brindar a los jóvenes de la región las herramientas y competencias para manejar un segundo idioma, y más el inglés que tiene trascendencia internacional, finalizó Tigreros.
Fuente: Marcela Quitian Escarraga / Secretaría de Educación del Valle del Cauca