Vestida con el uniforme de su institución educativa -porque las ganas de llegar a hacer manualidades solo le deja soltar el morral en casa y salir hacia la biblioteca acompañada de su madre, quien iba a tomar su primera clase de capacitación en herramientas básicas de sistemas-, se encontraba Mayerlin Andrea Arias, sentada en una de las salas de experiencias de la Biblioteca Pública Desepaz en donde rodeada de sus amiguitos y con cartulina, papel seda y ega en mano llenaba de bolitas color verde el dibujo que le había entregado su profesora Katherine Mazuera.
Contó Mayerlin: “Me encanta venir a la biblioteca porque aquí vengo a leer, a ver películas y hago taller de manualidades mientras comparto con mis amigos, vecinos y hasta con mi mamá que viene a hacer consultas en los libros de cocina. Hoy, por ejemplo, vino a aprender sobre sistemas. Si antes me la pasaba súper aquí, ahora no quiero salir porque tenemos más bonita la biblioteca, está más iluminada, hay más compus, más libros, la sala de televisión, tiene nuevos muebles y tenemos estas mesitas todas lindas para trabajar nuestras manualidades, todo gracias al alcalde Armitage y la Secretaría de Cultura”.
Pasada la tarde, en uno de esos calurosos días en el Distrito de Aguablanca y, como escenario la Biblioteca Pública Desepaz, cayó el telón. Era el inicio de la obra teatral ‘Luna’ que ofrecía este espacio a sus usuales visitantes con motivo de la conmemoración del Día Internacional del Teatro, que de la mano de los estudiantes del Instituto Popular de Cultura (IPC) impactaron a su público con una puesta en escena llena de diversión y un mensaje reflexivo.
Expectantes y emocionados lucían muchos niños y jóvenes de la popular comuna 21 que esperaban a ‘Luna’, ¿de qué se trataba? Esta era la puesta en escena que refleja el momento por el que pasan muchas jovencitas al verse sorprendidas con la visita de un portador que augura núbiles y el inicio de un largo ciclo que mes a mes eleva el significado de mujer y que llega a estar presente 30 o más años en la vida de este ser.
Entre los espectadores de la anhelada obra teatral no pudo pasar por inadvertido el rostro y la reacción de un sorprendido jovencito, este era Juan Sebastián Carabal, de 11 años, que impresionado en el desarrollo de la producción, no pudo evitar dejar salir sonrisas y quedar pensativo por lo que acababa de ver y escuchar ¿menstruación?, dijo Juan:
“Vivo con mi mamá y mi hermana y ahora estoy un poco confundido”, dejando salir una carcajada para luego explicar “creo que a mis compañeras de estudio no les ha pasado pero a mi mamá y, de pronto, a mi hermana, sí. Las mujeres cada mes, tienen la visita de una manchita roja que las hace verse más hermosas, más delicadas y es cuando más, nosotros los hombres debemos cuidarlas, mimarlas y no debemos burlarnos de esto porque es algo normal”.
Así, como Juan Sebastián otros vecinitos del sector, sentados o acostados en cojines gigantes pudieron disfrutar de un momento que celebró el ‘Día Internacional del Teatro’ pero que también trajo novedad a los servicios que ofrece la Biblioteca Pública Desepaz, donde niños, jóvenes, adultos y adultos mayores aprenden y se divierten rodeados de libros, instrumentos musicales, computadores con servicio de internet y hasta materiales de manualidades haciendo de la experiencias en las bibliotecas, un mundo de no perderse.
Fuente: Alcaldía de Cali / Rosa Castillo Manjarrés
